¿Por qué fracasamos al hacer Dieta?

Muchas personas que tienen como objetivo perder grasa corporal, temen hacer dieta. No he oído a nadie que hable demasiado bien de las dietas. Básicamente a todo el mundo le gusta comer bien y no pasar nada de hambre. Solo hay un problema hoy en día, y es que el concepto de alimentación se nos ha ido de las manos y llamamos alimentos a todo lo comestible y ni de lejos mucha de las cosas que tomamos son alimentos, lo podríamos considerar como simples saciantes del apetito. Aunque lo peor no es que sacien, sino que además son malos para lograr nuestros objetivos de conseguir un buen físico y una 
excelente salud.

¿Por qué fracasamos al hacer Dieta?

Aunque parezca muy complejo el mundo del deporte y la salud, realmente no tiene tanto misterio, solo hay que hacer las cosas bien y no dejarse engañar por nadie ya que muchos te intentarán vender dietas milagrosas y métodos mágicos que de un día para otro te harán parecer a personajes de revista. Y si una cosa he aprendido a lo largo de mis años de deportista es que nada, y vuelvo a repetir, nada se consigue de la noche a la mañana. Solo TU TRABAJO y SACRIFICIO podrán hacer que lo consigas.

1. - Queremos hacerlo todo muy rápido.

 Al igual que para construir un edificio se requiere de un tiempo, dado que hay una serie de limitantes como el número de trabajadores y el material de obra, nuestro cuerpo funciona igual. Tenemos un organismo el cual puede funcionar a un ritmo, si intentas hacerlo trabajar de forma excesiva te pasará factura y caerás de nuevo en el hecho de dejar la dieta. Un refrán que puedes recordar y que debes cumplir: VÍSTEME DESPACIO, QUE LLEVO PRISA. Yendo rápido solo conseguirás hacer las cosas mal y a medias. 

2. - Concepto de Alimentación Erróneo. 

La comida no es más que nutrientes para nuestro cuerpo y por tanto debemos darle lo que necesita y no lo que quieres. Obviamente se puede disfrutar de la alimentación, ya que si nuestro cuerpo necesita proteínas podemos elegir de donde obtenerlas procurando que sea siempre de la mejor fuente posible (como pescado y carne que más nos guste). O incluso las grasas que son tan necesarias, en vez de obtenerlas de dulces y golosinas, podemos elegir un fruto seco que nos encante y tomarlas de ahí. 

Si le das a tu cuerpo lo que necesita no engordarás y además te prometo que tu estado de ánimo mejorará notablemente si eliges una buena dieta.

3. - Dietas Externas

Si decides elegir una dieta que funciona para otra persona, estoy seguro de que te dará leves resultados al principio pero pasado un tiempo te desanimarás dado que te encontrarás cansado/a y los resultados se estancarán. La razón principal es que esa persona diseñó la dieta para él, sus necesidades son distintas a las tuyas. Es por ello que si te gusta una dieta debes siempre rediseñarla adaptándola a las calorías que tú necesites, sino acabarás dejándola.

4. - Pasar mucha hambre

Debe ser una dieta que nos permita tener un control sobre el hambre para que en ningún momento pasemos mucha hambre ya que es en estos momentos cuando comenzamos a comer hasta quedar saciados. Y aunque bien es cierto que al principio, después de comer nos quede la sensación de que hemos comido poco rápidamente nuestro cuerpo de adaptará a ello. Hay que diferenciar entre esto último y pasar hambre de verdad. Si te ocurre esto debes llevar contigo algún pequeño aperitivo que ayude a bajar esas ganas de comer y llegar a la hora de comida sin ansiedad

¿Cómo diseñar una buena dieta?

Para diseñar una dieta debemos primero saber cuántas calorías necesita nuestro cuerpo. Esto es clave para lograr diseñar una dieta dado que si no sabemos cuánta energía gasta nuestro cuerpo, ¿Cómo sabremos cuánto alimento tomar?. Es por ello por lo que debes dedicarle un tiempo a calcular tus calorías diarias antes de comenzar a diseñar la dieta adaptada a ti.

Una vez que sabemos el paso anterior debemos separar esas calorías en macronutrientes, es decir, cuántos gramos necesitamos de proteínas, grasas e hidratos ( aparece en el enlace de la palabra macronutrientes). Esta es una de las fases clave para la pérdida de grasa, dado que una correcta distribución puede hacer que adelgaces, engordes o simplemente te mantengas. Las proteínas harán que te encuentras saciado durante más tiempo, lo cual podría ayudarte a no sentirte hambriento a los pocos minutos.

Otra clave fundamental para mantenerte en una dieta es crearte un hábito alimenticio dado que tu cuerpo se acostumbrará y no le supondrá ningún esfuerzo esperar hasta la siguiente comida, es decir, adiós ansiedad y hambre. Para ello debemos comer aproximadamente cada 3 horas, sin hacer picotear nada entre tiempo ( golosinas, patatas, galletas,...), aunque sí podríamos incluir alguna fruta o alguna barrita energética.

Tomar alimentos que nos alcanzar nuestros macronutrientes, pero a la hora de elegirlos es importante que no nos desagraden. Todos tenemos alimentos que nos gustan, que si tenemos que comer comemos y que odiamos comer. Elige tan solo alimentos que te agraden y que no te importe comer, es decir, hay una gran variedad de frutas, verduras, frutos secos , carnes y pescados (por cierto la gran parte de las comidas deben de provenir de este tipo de alimentos) entre los que elegir por tanto no hay ningún motivos por el que comer nada que nos desagraden.


Por último, tu actitud. Si realmente quieres cambiar, nada te lo puede impedir, solo tú pondrás piedras sobre tu caminos. Olvida los comentarios negativos de los demás que no se atreven a cambiar por miedo y sé tú el que cambia pero hazlo tanto solo por ti por sentirte bien y para estar orgulloso de ti.


Si les ha gustado y servido de ayuda pueden dejarme un comentario abajo para animarme a seguir escribiendo.